Usa tu mano no dominante para realizar tareas como peinarte, lavarte los dientes , mover el ratón, intercambia el cuchillo y tendor de manos comiendo.
Utilizar las dos manos para activar el cerebro
Al comenzar a ejercitar la mano no dominante, el cerebro realiza nuevas conexiones neuronales y estimula habilidades que permanecían en desuso.
Los seres humanos nacemos con una organización cerebral determinada. A lo largo de nuestros primeros años, la lateralidad se va desarrollando y, hacia los siete años de edad, el predominio de uno de los hemisferios parece haberse asentado.
Por tanto, los diestros muestran dominancia del hemisferio izquierdo mientras que en los zurdos ocurre al contrario.
De este modo, al ejercitar con mucha más frecuencia una de las mitades de nuestro cuerpo, la otra queda en desuso y no desarrolla la misma habilidad. Pero, además, esto lleva a una gran especialización cerebral de las funciones, en la que un hemisferio cerebral se estimula de forma mucho más activa y frecuente que el otro.
Beneficios de utilizar las dos manos Ser ambidiestro mejora la simetría en los movimientos y el desempeño atlético, por lo que tiene evidentes ventajas para quienes practican deporte o danza.
Una persona ambidiestra tendrá más repartida la destreza, por lo que, a priori, el daño en uno de los hemisferios ocasionaría menos limitaciones.
Estás serán las que propiciarán los cambios y te otorgarán un nuevo enfoque, despertando o potenciando habilidades que permanecían en desuso.